Sigo viendo luchas de eliminación clásicas de Survivor Series, que, como el Royal Rumble, me ha gustado mucho desde pequeño. De hecho, para hoy he visto una que no había mirado desde pequeñín, una de 1991.
Recuerdo ese evento como si fuera ayer, porque Undertaker venció a Hulk Hogan y se convirtió en campeón mundial por primera vez en su carrera. Pero aparte de eso, el evento tuvo cuatro combates de eliminación, entre ellas, la primera, con dos equipazos.
Por parte de los rudos, estaban Ric Flair, Ted DiBiase, The Mountie y The Warlord. Por parte de los técnicos, tenemos a Roddy Piper, Bret Hart, The British Bulldog y Virgil. 8 Clásicos (unos más que otros).
Piper es genial. No es el mejor luchador del mundo, pero su carisma es inigualable, tanto como rudo como cuando hace de face. La energía que desprende en la batalla es muy fuerte, y el público le ama. Flair y DiBiase, por su parte, son dos rudazos, y son especialistas en hacer trampas, aumentando aún más el furor del respetable. Cuando Piper va a por el nature Boy, la cosa se pone interesante.
Con trampas, los rudos eliminan a Dave Boy Smith, y luego los técnicos les devuelven la jugada, haciendo lo mismo con The Warlord. A Virgil le toca hace de underdog, y recibe a base de bien.
Hay muchos momentos en la que se lía con un todos contra todos. En última instancia, vuelve a pasar, con todo el mundo luchando fuera del ring, menos Flair, que estana tirado en él. El referee descalifica a todos menos él, así que el Nature Boy logra una victoria importante, en los primeros meses de su carrera en WWF.
Rarito final, puesto que solo deberían ser descalificados aquellos que estuvieran legalmente activos en la batalla. Por lo demás, es un combate con buena energía, pero sin grandes alardes.
Puntuación: ***
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